La fase de obra desarrollada durante el último año en las galerías ha impermeabilizado parte del edificio, reforzado su estructura y afianzado su estabilidad, con una intervención de auténtica cirugía entre acantilado y edifico. La intervención ha sacado a luz nuevos espacios que permanecían cegados e inaccesibles, como un pasadizo existente entre la construcción y el acantilado,
que ha estado oculto durante décadas. De acuerdo con el planteamiento de “Obra Abierta”, se trabaja ya para habilitar el paso, asegurarlo, musealizarlo, y exponerlo durante las visitas mediante un sistema de pasarelas, mostrando su magia, historia y funcionalidad.